¿Estás entrenando duro para ponerte fuerte de cara al verano? La alimentación es un pilar imprescindible para poder llevar a cabo los entrenamientos y obtener el mayor rendimiento posible de ellos. Hoy voy a revelarte unos consejos nutricionales para aquellos que estáis realizando entrenamientos de fuerza.
Hidratos de Carbono (HC)
Es importante la ingesta adecuada de HC ya que cuando comienza la práctica deportiva comienza el organismo a consumir glucógeno y cuando este se agota, aumenta hasta un 12% o el doble de lo habitual el consumo de proteínas.
Grasas (G)
El contenido de grasa no debería exceder del 20-25% de toda la energía (aportar ácidos grasos esenciales, vitaminas liposolubles y conservar el peso).
Se necesitan en un porcentaje bajo de las calorías totales (inferior al 25%) y que hay que consumir más ácidos grasos omega 3 (procedentes del pescado salvaje).
Proteínas (Pr)
El consumo de proteína tiene que ir en proporción al peso y exigencia de cada disciplina deportiva. Tiene que ser suficiente para rellenar los depósitos de glucógeno, así como formar y reparar los tejidos.
Quienes realizan entrenamientos de fuerza deben consumir hasta 1,8-2g por kg de peso y día de proteínas.
Ingestas de proteínas mayores de 2,4g/kg/día no producen en los deportistas que entrenan fuerza un mayor aumento de la síntesis proteica que en los que consumen 1,4g/kg/día.
Es importante llevar una buena alimentación y que esta sea equilibrada. Aquellos deportistas que quieran trabajar un entrenamiento de fuerza, deben aportarle al cuerpo cada uno de los nutrientes necesarios para poder llevar a cabo dichos entrenamientos. Por otra parte, aquellos que queráis perder grasa corporal al mismo tiempo que realizar entrenamiento de fuerza y lleváis una dieta que os quita algunos de los nutrientes necesarios podéis tomar algún suplemento que os compense la falta de esos alimentos.
Laura Ríos Casanova